Esta es una noticia de la prensa Española que salió recientemente:
Los trabajadores de turnos de noche pierden cinco años de vida por cada quince de jornada laboral, se divorcian tres veces más que el resto de sus compañeros y tienen un 40 por ciento más de posibilidades de padecer trastornos neuropsicológicos, digestivos y cardiovasculares.Estas son algunas de las conclusiones de diversos estudios con los que los doctores Eduard Estivill, jefe de la Unidad del Sueño del Instituto Dexeus de Barcelona, y Apolinar Rodríguez, responsable del Servicio de Neurofisiología del Hospital de la Paz de Madrid.
Lamentablemente muchos pediatras estamos avocados a estas labores nocturnas y no caemos en cuenta el detrimento que para nuestra salud emocional y física conlleva. Lo peor de todo es que existan algunos profesores que piensen que para estudiar y aprender pediatría, los estudiantes y residentes obligatoriamente tienen que hacer una cantidad determinada de turnos al mes o la semana. Yo pienso que esto es una afirmación sin fundamento. ¿Quién dijo que se aprendía más de noche que de día? ¿Hay algún estudio serio que compruebe esta teoría?.
la verdad es que en ocasiones los servicios de urgencias se ven abarrotados durante las noches, pero esa no es la única oportunidad en que el residente puede aprender patología de urgencias.
Si en mis manos estuviera ningún residente haría turnos ya que el principal objetivo de éstos es aprender y nunca deben ser patrimonio laboral de ninguna clínica, hospital o institución de salud, su prioridad es aprender y no trabajar.
que buen punto!
lastimosamente los turnos no los asignan con el fin de que aprendamos màs como residentes sino mas bien para cubrir las grandes falencias asistenciales de nuestros hospitales (públicos), pero esto no acaba en las jornadas de noche, los horarios del personal de salud con jornadas de 12 horas..., porqué en otros paises funcionan perfectamente los hospitales con jornadas de 8 horas diurnas??